En ocasiones cuando me imagino vuestras sesiones, las concibo como un pequeño cuento.
En esta ocasión me imaginé a esta niña y su mamá paseando por el bosque, donde en un claro encontrarían una paquete muy especial; una tarta sencilla y elegante para celebrar el segundo cumpleaños de la pequeña.
Las dos encienden la vela y comen pedacitos de pastel mientras ríen y juegan.
Y sin guion, ni proponerlo ni tan siquiera comentarlo, el cuento se sucede y yo al editar las fotografías me quedo maravillada al ver como ellas contaran una pequeña parte de vuestra historia.
Esta es una versión en exterior de las sesiones Smash Cake sin atrezo y dándole más importancia a la parte familiar.